Nuestros tres días en Cortijo El Campillo se clasifica como uno de
nuestros mejores escapadas hasta ahora. Los propietarios Annika y Martin
fueron anfitriones absolutamente sorprendentes. Las habitaciones
estaban limpias y cómodas y nos aprovechamos de las bicicletas de
montaña robustas de Martin para explorar los increíbles alrededores. Los
desayunos se convirtió rápidamente nuestra comida favorita del día con
los suntuosos spreads de Annika de crepes, mermeladas y pan maravilloso,
una forma perfecta de empezar nuestros días (que en su mayoría
dedicados a tomar el impresionante paisaje del desierto en bicicletas
por una tarifa de 30 km al día). Martin fue muy eficiente y nos ayudaron
a recoger las espectaculares rutas de ciclismo que llevó a Cabo de
Gata. Sin duda volveremos.
"everydaydreamer"
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